Tú también puedes emprender
Como lo ha hecho Alexandra Alemañy
Conoce su historia...
Hace 4 años, el 19 de julio del 2015, abrí mi negocio mientras terminaba el último año de mi bachillerato en Gerencia y Recursos Humanos en la Universidad Interamericana de P.R Recinto de San Germán. Siempre soñaba con tener una tienda y aunque no siempre estuve clara de cómo hacerlo realidad, poco a poco lo fui desarrollando y fui visualizando meticulosamente cada detalle. Al fin y al cabo, lo que hace de un proyecto uno exitoso es que sea genuino y que refleje un poco de ti y lo que quieres entregarle al mundo. Fueron tantos años en los que visualizé todo con mucho miedo y con una pequeña voz que me decía que era algo muy difícil de alcanzar o un reto muy grande para mí, pero si escuchamos bien, Dios siempre te habla con una voz aún más fuerte. Es todavía increíble como desde el principio Él fue preparando mi camino y me regaló una familia que a pesar de cualquier cosa, siempre me hacen sentir segura de lo que puedo dar y me permiten siempre soñar en grande… y Nómada es precisamente eso; un espacio repleto de sueños. Definitivamente desde el principio no ha sido un camino fácil y ha estado lleno de obstáculos, sacrificios, lágrimas y cuestionamientos, pero cuando haces lo que amas y lo haces entregando todo de ti, eres feliz. Además, puedo decir que en estos años creciendo como negocio no solo he vendido tesoritos, sino que he conocido personas especiales que se han vuelto amigos y que al igual que he tocado sus vidas ellos han tocado la mía y tengo muchos momentos que atesorar. Es gratificante cuando tu negocio o tu trabajo empieza a transformarse y le añades un nuevo propósito. Al final de día, eso es lo que cuenta, que siendo feliz puedas tambien compartir esa felicidad y entregarla a otros. Es imperativo recalcar que si tienes un sueño en tu corazón y en tu mente es porque Dios lo puso ahí y si confías y te entregas, el te dará todas las herramientas para que lo alcanzes. Es un trabajo de dos; dejas todo en sus manos y trabajas fuerte para alcanzarlo y Él te dará TODO lo que necesitas para que lo logres. Me falta muchísimo por crecer y aprender en toda esta aventura pero si tuviera que darte la fórmula para alcanzar un sueño diría que es tener fe, sacrificarse mucho y hacer todo con amor y propósito.
Confía en ti porque tú también puedes.
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